Latigazo cervical es un término usado para describir las fuerzas de aceleración-desaceleración del
cuello, el cual puede ocurrir por una colisión en la parte trasera o lateral del vehículo. Estas
fuerzas pueden producir lesiones dolorosas en músculos, ligamentos, articulaciones del cuello y/o
en otras áreas de la columna.
El latigazo cervical es una lesión de la que la mayoría de las personas se recuperan bien. Las
personas que se muestran positivas sobre su recuperación y realizan las actividades de su vida
diaria con la normalidad que se pueden tolerar, se recuperan más rápido que aquellas que
reducen marcadamente su actividad.
Los principales síntomas asociados a ésta patología son dolor de cuello y rigidez. También
pueden aparecer otros síntomas como dolor de cabeza y en los brazos. En la exploración física
podemos encontrar pérdida de movilidad del cuello, debilidad de los flexores profundos (disfunción
del control motor), alteraciones visuales y del equilibrio.
Los síntomas pueden aparecer después del accidente o tener un retraso en el comienzo
de unas pocas horas e incluso días. La naturaleza de las lesiones y el número y la
severidad de los síntomas variará entre los distintos pacientes. Uno de los aspectos
determinantes tiene que ver con si se vió venir el accidente y con la posición previa del
cuello.
Se tiende a utilizar el radiodiagnóstico para conocer la gravedad de los síntomas
observando una rectificación cervical en las radiografías que muchas veces no sabemos
si ya anteriormente existía, por lo tanto no nos ayuda en muchas ocasiones a predecir la
gravedad. No hay una clara asociación entre rectificación cervical y gravedad de los
síntomas.
El tratamiento por parte de un fisioterapeuta es fundamental para recuperar la movilidad del
cuello, mejorar el control motor, la movilidad ocular y fomentar la actividad del paciente.